Hoy recibí este mensaje de Kabbalah:
Existe una historia sobre una mujer que decide encontrar a Dios. Ella se deshace de todas sus posesiones mundanas, vuela a la India, escala la montaña más alta que puede encontrar, y se sienta a orar y meditar. Ella llama a Dios "¡¿Dónde te encuentras?!" Y Dios le responde: "Estoy aquí abajo con la gente". No tenemos que hacer votos de pobreza y vivir en un "Ashram" para conectarnos con nuestro Creador. Sólo necesitamos conectarnos con la gente para hacer esa conexión divina.
Hoy, dedícate a tres personas. Encuentra en tu corazón la forma de hacerlas sentir mejor, cubrir sus necesidades, motivarlas para que se involucren más en sus vidas.
...........................................................................................................................................
Y al leerlo me puse a pensar en la reciente noticia del tiroteo en la universidad de Estados Unidos y en cómo este tipo de sucesos tan lamentables es cada vez más frecuente. Chicos que se sienten solos, desconectados del mundo, cuya única salida es protagonizar una masacre de este tipo.
No puedo adentrarme en la psique de ellos, ya que mi conocimiento de la psicología es realmente incipiente, pero si puedo apoyar lo que dice la Kabbalah. La conexión con la gente nos permite conectarnos con la divinidad.
Y un entorno laboral cálido, amable, donde la gente se conecte con sus compañeros de trabajo, hace de cada día una grata experiencia y de cada tarea un reto digno de disfrutarse.
Foto: Seminario de Leadership, Panasonic 2006
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario